Nuestro objetivo en la etapa de Iniciación (desde los 4 a los 14 años) es la formación integral de nuestros alumnos. En estas edades, los niños, mediante la práctica del judo van a ir desarrollando una serie de capacidades físicas básicas para su futuro desarrollo, como son la coordinación, lateralidad, equilibrio, pero sin olvidar otras de tipo cognitivo-emocional, como son el respeto, autoconfianza, solidaridad, perseverancia, y un largo etcétera, que hacen del judo, probablemente uno de los deportes más completos en la actualidad.
Asimismo, la práctica del Judo va a mejorar la AUTONOMÍA del niño, a través de la gran variedad de sensaciones y percepciones que se producen y que le ayudarán a mejorar su adaptación y la socialización. Podemos afirmar que una de las verdaderas “joyas” del Judo es el hecho de que todo el mundo puede practicarlo, independientemente de sus características físicas, edad, sexo, etc.
Por último, utilizamos también otra herramienta básica a nuestro entender en estas edades: LA COMPETICIÓN. En nuestro club entendemos ésta únicamente como un juego, como un medio que ayuda al niño a aprender a ganar y a perder, a ser humilde en la victoria y tenaz en la derrota.